Anoche ganó el baloncesto

En ocasiones una foto dice más que cientos de palabras. La imagen que enmarca estas líneas es reflejo de ello. Un abrazo entre dos entrenadores de reputación, intuición, carácter y amistad.

Pachy Cruz y Tony Ruiz dieron cátedra anoche de sus capacidades tácticas en el Juego del Año en lo que va de torneo BSN. No bastaron 40 minutos sino que la agonía, el aumento de tensiones y el gozo se extendió por 10 minutos más. Capitanes de Arecibo prevaleció, 93-91, para despojar del perfecto 6-0 de Quebradillas a su arribo. Una ligera mancha en un gran arranque de campaña…

Previo al partido, la gerencia de Arecibo tributó un pequeño, pero significativo y cálido homenaje a Cruz, ‘Capitán de Capitanes’ en tierra de Piratas, por sus servicios como jugador por 20 años y otros siete como Coach. Bajo su mando se alcanzaron tres campeonatos en cuatro series finales. Más que justo ese momento especial.

Ver y escuchar a todos levantarse -en un recinto repleto- para ovacionar por varios minutos a Pachy Junior (el Pachy Senior es quien escribe) fue una retribución genuina del cariño, admiración y respeto hacia uno de sus héroes de pueblo. El perenne banderín con su nombre y número 13 retirado es testigo de sus gestas…

Y entonces, Tony Ruiz, tras la corta ceremonia caminar para felicitar a Cruz y ambos confundirse en un abrazo prolongado, bien expresa lo que es el deporte: una pugna momentánea, un proceso de aprendizaje, una puerta de convivencia, disciplina, ejecución y deferencia mutua.

Anoche en un atestado Coliseo Manuel Iguina Reyes ganó el baloncesto en sentido amplio. Cada seguidor respaldó su insignia con libertad y sin acoso; el juego así lo exigió. Trece cambios de delantera, 11 empates y un vencedor a la postre.

Pachy Cruz saluda al público en el sencillo y cálido homenaje que le tributó la gerencia de su equipo de siempre: Capitanes.

Todavía restan cinco más de esta serie comarcal con ribetes de Final. El lunes próximo será el próximo capítulo en la Raymond Dalmau y tal como ayer, se espera cancha llena.

Quiero pensar que el honrar a Pachy de forma especial, sea similar para un hijo de Quebradillas, un obrero de básquet, de apellido Ruiz Román, también con DNA Pirata desde que tiene uso de razón. Se lo merece, independiente de que hoy sea del color amarillo-negro del rival de siempre. Tony es gestor de voluntades, aptitudes en el desarrollo de cientos de jóvenes canasteros del Guajataca, muchos que han participado en el BSN. Huelga comentar; la historia está escrita…

Dos jefes técnicos en el Ojo del Huracán, que sin vientos ni desastres que lamentar, trajeron lluvias de alegrías, competición de altura y gracia, en un cotejo tradicional entre dos grandes franquicias del País. Bien lo consignó el insigne locutor Rivera Morales: “Qué juego señores, qué juego”…

Reitero, anoche en la Casa de Petaca triunfó el deporte, simple y llanamente dicho. Y las fotos de Sander Uquillaf así lo manifiestan